Increíbles campos de arroz en terrazas ganadas a abruptas laderas selváticas. La vida allí, como en todas partes, transcurre a su ritmo. Aquí el ritmo lo marcan las cosechas de arroz y las visitas de los turistas. Un montón de mujeres, vestidas con el traje tradicional de sus etnias, se han adaptado al turismo y parece que lo han convertido en su principal fuente de ingresos. En los trekkings más turísticos y típicos te acompañarán durante los pateos para después intentar venderte sus carteras, pulseras, manteles... Es mejor intentar abstraerse de ellas y aceptarlas como parte del trato. Me imagino que si te alejas de estos circuitos turísticos esta compañía "obligada" te la podrás evitar. A pesar de todo merece mucho la pena visitar este rincón de Vietnam y recorrer sus resbaladizos senderos. Eso sí, con los ojos bien abiertos, porque siempre están pasando cosas...
Niña jugando en un charco en medio de un sendero.
Mujer con el traje étnico en un telar tradicional.
Hoja de platanero con arrozales al fondo
Cabaña y arrozal cerca del pueblo de Sapa.
Paisaje y choza de cuento....
Unos gorrioncillos vietnamitas saboreando unos vasos de gelatina. Pues esto es todo y hasta la siguiente, creo que ya solo quedan dos episodios;) Un saludo!!!
Tan iguales y tan diferentes...
ResponderEliminarUnos infelices por tener de todo... otros tan felices sin tener nada...
Me ha gustado, ademas no se ve ningun turista.